Somos un pueblo de ancestros que decidieron adentrasen en las selvas colombianas debido a las masacres caucheras que sucedían en las natales tierras del Napo-Ecuador.
Hoy en día habitamos en la frontera Colombo-ecuatoriana y, como pueblo, nos hemos organizado en diferentes espacios y uno de ellos en el municipio de San Miguel con tres comunidades San Marcelino, Juan Cristóbal y San Luis, arraigados culturalmente a los usos y costumbres y encaminados bajo la planta Sagrada de Yagé.